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Aplicación de Toxina Botulínica en Diversos Padecimientos| Rehabi-Center
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APLICACIÓN DE TOXINA BOTULÍNICA

La Toxina Botulínica es un producto biológico derivado de la bacteria Clostridium botulinum. Dentro de sus funciones en la medicina destaca su acción relajante sobre el músculo, su función antisecretora en las glándulas salivales y sudoríparas y su acción analgésica en los casos de dolor somático y neuropático.

Toxina Botulínica en Espasticidad

Toxina Botulínica en Espasticidad

 

Se aplica con el fin de relajar los músculos «rígidos» en lesiones cerebrales, tal como ocurre en la Parálisis Cerebral, y en el Evento Vascular Cerebral.

 

Cuando se relaja el músculo espástico tenemos mayores probabilidades de mejorar la calidad del movimiento de la extremidad afectada y reducimos el índice de complicaciones y deformidades así como el dolor.

 

Se aplica mediante la inyección directa en los músculos espásticos utilizando el ultrasonido como guía para lograr una inyección confiable y segura.

Toxina Botulínica y Sialorrea

Toxina Botulínica en Sialorrea

 

El control de la salivación en personas con lesiones cerebrales es importante. El exceso de saliva puede traer consecuencias que faectan la salud dental, oral y psicolóca de los pacientes y de sus familiares.

 

La Toxina Botulínica, cuando se aplica a las glándulas salivales, disminuye la excreción de saliva de un modo muy efectivo. El procedimiento lo realizamos con guía ultrasonográfica y es muy seguro y rápido en manos con experiencia.

Toxina Botulínica y Neuralgia del Trigémino

Toxina Botulínica en Neuralgia del Trigémino

 

La Neuralgia del Trigémino disminuye la calidad de vida de quienes la padecen. Se trata de dolor facial intenso y súbito de carácter episódico que afecta un lado de la cara en la mayoría de los casos.

 

La aplicación de Toxina Botulínica es una alternativa muy útil en los pacientes con este tipo de neuralgia, trayendo alivio a mediano y largo plazo.

 

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Toxina Botulínica y Parálisis Facial

Toxina Botulínica en Parálisis Facial

 

Dos secuelas muy frecuentes en los pacientes con Parálisis Facial son las sincinecias (movimientos anormales e involuntarios de la cara) y la asimetría facial.

 

Gracias a la Toxina Botulínica, hoy en día podemos tratar estas dos secuelas con grado de aceptación muy alto. Se requiere inyectar el biológico a los músculos involucrados teniendo un efecto hasta de 6 meses.